Cabo Raso es un lugar fascinante en nuestra provincia. La historia de su declive como un pueblo costero y su transformación en un refugio ecológico lo hace aún más interesante.
La playa está ubicada a 180 km de Trelew. El nombre del pueblo deriva del accidente geográfico que está en sus costas. Este a su vez se denomina Raso, ya que no es un cabo alto, sino bajo y achaparrado que permitió el diario embarque y desembarque de quienes visitaban sus aguas.
Cabo Raso solía ser un próspero pueblo costero con una población de alrededor de 300 habitantes. Contaba con servicios como una escuela, un juzgado de paz, telégrafo y un hotel para visitantes y pescadores. Sin embargo, el cambio de la Ruta Nacional Nº 3 entre Trelew y Comodoro Rivadavia marcó el inicio de su declive, ya que la ciudad de Camarones se convirtió en un puerto más accesible. La población de Cabo Raso gradualmente migró a otras ciudades, y la última habitante registrada, Mercedes Sinat, murió en 1983.
A pesar de su declive como pueblo, Cabo Raso sigue siendo un lugar atractivo debido a su belleza natural. Su playa de canto rodado y aguas turquesas ofrece un entorno paradisíaco y tranquilo. La enorme bahía con costas de pedregullo es perfecta para quienes buscan un lugar sin aglomeraciones.
La zona es rica en vida silvestre. Se pueden observar lobos marinos, petreles, choiques, guanacos y la típica flora patagónica. Esto lo convierte en un destino atractivo para los amantes de la naturaleza y la observación de aves.
El Cabo, un hospedaje ecológico con capacidad para 25 personas, se encuentra en la zona y ofrece una experiencia de alojamiento única. Utiliza agua salobre de pozo, termotanques a gas o leña, y obtiene energía de fuentes solares, lo que lo hace sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
Cabo Raso es un lugar ideal para actividades al aire libre. Además de disfrutar de la playa y el mar, los visitantes pueden practicar surf, pescar y realizar caminatas por los senderos circundantes.
Cabo Raso es un lugar que combina la belleza natural con una historia intrigante. Para quienes buscan escapar de las multitudes y disfrutar de la tranquilidad de la costa patagónica, este lugar ofrece una experiencia única en Argentina.