Este sábado 15 de marzo, la Capilla Nazareth en Drofa Dulog celebrará su 133º aniversario con un emotivo culto de canto a las 17. Esta capilla, un símbolo de la tradición galesa en la provincia, no solo es un espacio de culto, sino también un reflejo de la historia y la cultura que los primeros colonos galeses trajeron a la región.
La zona de Drofa Dulog es una de las más antiguas pobladas por los colonos galeses, que comenzaron a asentarse en el siglo XIX. El crecimiento de la población fue notable, especialmente con la llegada de nuevos contingentes a fines de ese siglo. En sus primeros años, los fieles de la zona asistían a la Capilla Glyn Du, construida entre 1873 y 1875, y luego a Moriah (1880). No fue sino hasta 1881 que se levantó la conocida como “Capilla Chica” o “Capel Bach”, una estructura sencilla de adobe con techo de paja.
El creciente número de fieles impulsó la necesidad de una nueva capilla más grande y céntrica. Así, se erige la Capilla Nazareth, gracias al terreno cedido por Edward Owen y la construcción liderada por Evan Jones. La capilla se denomina “Nazareth” por sugerencia de David Lloyd Jones, el primer pastor del lugar. Los materiales fueron aportados por los propios vecinos, quienes se unieron para dar forma a este espacio que se convirtió en un pilar para la comunidad. Una de sus características más singulares es su distribución, con dos puertas en los extremos del frente y el púlpito ubicado en ese mismo lugar, algo que la distingue de otras capillas galesas y que recuerda a las tradicionales de Gales.
La capilla se inauguró oficialmente en enero de 1892, aunque el proceso de construcción se había completado en diciembre del año anterior. La elección de la fecha fue motivo de debate en su momento, pero finalmente se determinó que el 11 de enero sería la fecha oficial.
A lo largo de su historia, la Capilla Nazareth se convirtió en el centro de la vida social y religiosa de Drofa Dulog. Además de los cultos regulares, la capilla sirvió como escuela primaria (Escuela Nacional N° 13) hasta 1917, y fue también el hogar de ensayos corales y actividades culturales, como la poesía, la recitación y otros artes escénicos. Uno de los momentos más esperados por la comunidad era el tradicional té de cada 28 de julio, en honor al aniversario del desembarco galés, una festividad que unía a las familias en torno a una celebración de trabajo comunitario y alegría.
En las últimas décadas, la Capilla Nazareth tuvo que adaptarse a los cambios sociales y demográficos de la zona. Aunque la población rural ha disminuido y la falta de un pastor permanente ha afectado la cantidad de actividades, la congregación ha mantenido viva la tradición a través de cultos mensuales y celebraciones especiales. En los últimos años, la capilla fue declarada Patrimonio Histórico y Cultural de la Provincia, lo que la ha convertido en un importante punto turístico con visitas guiadas y actividades culturales que celebran el legado galés.
El aniversario de este 2025, con el culto de canto, será una oportunidad para rendir homenaje a la fe, la cultura y la historia que la Capilla Nazareth representa. Su legado, que ha perdurado por más de un siglo, continúa siendo un faro de esperanza, unidad y tradiciones en la región. Este aniversario es también un recordatorio de los lazos que unen a las generaciones de la comunidad y la importancia de mantener viva la memoria histórica, transmitiendo los valores cristianos y culturales que la capilla ha sembrado a lo largo de los años.
Este sábado, al participar en el culto de canto, se podrá experimentar la esencia de una capilla que, más allá de ser un lugar de culto, sigue siendo un puente entre generaciones, un punto de encuentro para la comunidad y un testimonio viviente de la historia galesa en Chubut.