Los argentinos figuran entre las mayorías de repatriados por sus gobiernos de la región, aunque la crisis de los varados persiste porque los sanitaristas siguen recomendando fronteras cerradas para el regreso de quienes quedaron varados en el mundo como medida de freno a la expansión del coronavirus, informço Clarín.
Un seguimiento de las informaciones suministradas a nivel oficial por los distintos países en Latinoamérica que enfrentaron el reclamo de sus ciudadanos queriendo volver a sus casas muestra el siguiente esquema: desde el 15 de marzo pasado, unos 70.000 argentinos pudieron volver, en vuelos de Aerolíneas Argentinas; en vuelos de aerolíneas privadas que aceptaron traerlos y que fueron especialmente autorizadas a hacer; en aviones militares de la Fuerza Aérea o en charters especialmente contratados por la Cancillería, como el caso con Cuba y en otros combinados con México.
Si bien como ya publicó Clarín los varados en Europa, Estados Unidos y países de Asia tendrán que esperar para volver, los argentinos repatriados figuran como mayoría comparados con los de Chile, por ejemplo. Este es el único que puede compararse en la totalidad de quienes volvieron por avión y tierra como el caso argentino: 39.340 chilenos fueron repatriados a su país al 9 de abril, por aire y tierra.
Para la misma fecha, México hizo retornar a 8.535 de sus ciudadanos. El gobierno de Andrés Manuel López Obrador figura entre los que dispuso aviones de la Fuerza Aérea Mexicana para llevarse a sus ciudadanos de vuelta a sus casas. En varias de las aeronaves trajeron argentinos de aquí y de otros países y se llevó mexicanos. Esta semana lo hizo en un vuelo que trajo uruguayos, argentinos y chilenos en distintas escalas.
También aviones militares repatriaron a brasileños en «sociedad» con los uruguayos. Los registros a los que se accedió habla de 11.000 repatriados a Brasil y 2.334 a Uruguay.
Los peruanos habrían repatriado a 7.000 de sus ciudadanos hasta principios de abril, según informó la cancillería argentina. Y otros cientos siguieron llegando en los días siguientes a Lima. Algunos de ellos en los Hércules C-130 de la Fuerza Aérea argentina, que trajo ciudadanos de este país que habían quedado allí. A Colombia habían vuelto a principios de abril unos 3.196. Y a Costa Rica, unos 1.044, siempre según los comparativos de Argentina.