Esta región, conocida por sus paisajes de ensueño, promete una experiencia inolvidable tanto para quienes buscan aventura como para los que desean desconectar del ajetreo urbano. Esquel pueblo patagónico que encanta con su belleza.
Este destino se encuentra al oeste de la provincia de Chubut, en la región patagónica argentina, dentro de la Cordillera de los Andes. La ciudad es un punto de partida perfecto para aquellos que desean explorar los rincones más recónditos de la región sur del país. A solo 284 kilómetros de Bariloche y 619 kilómetros de Trelew, Esquel está bien conectada por rutas que permiten acceder fácilmente desde distintas zonas del país, lo que la convierte en un sitio accesible y cercano para muchos.
La oferta de actividades en esta propuesta turística es tan variada como su paisaje. Sin duda, uno de los mayores atractivos es la famosa excursión en «La Trochita», el viejo expreso patagónico. Este histórico tren, que ha recorrido los paisajes de la región por más de 70 años, sigue siendo una de las experiencias más buscadas por quienes visitan la ciudad. La travesía a bordo de la centenaria formación permite adentrarse en el corazón de la Patagonia de una manera única, mientras se disfrutan las vistas de la estepa patagónica y la cordillera. La excursión se realiza en el tramo Esquel-Nahuelpan, un recorrido que atrae tanto a turistas como a amantes de la historia ferroviaria.
Más allá de este emblemático trayecto, Esquel ofrece muchas otras alternativas. El Parque Nacional Los Alerces, con sus imponentes bosques de alerces milenarios, es ideal para disfrutar de actividades como trekking, kayak y paseos por sus aguas cristalinas. En la zona se puede disfrutar también de la tranquilidad de sus playas y la belleza natural de sus senderos. Además, los más aventureros tienen la opción de practicar rafting en el Río Corcovado o lanzarse en canopy entre los árboles en Pueblo Alto, una actividad que ofrece una vista espectacular de la región.
Para quienes buscan historia y geografía, Piedra Parada, un antiguo volcán, invita a caminar entre sus formaciones rocosas y aprender sobre el pasado geológico.
Llegar a este destino es sencillo gracias a diversas opciones de transporte. Si se viaja en auto, desde Bariloche, se puede tomar la Ruta 40 y disfrutar del paisaje que conecta estas dos ciudades patagónicas. También se puede optar por el micro, con varias compañías que ofrecen servicios desde Buenos Aires, Bariloche, Trelew, Comodoro Rivadavia y otras ciudades cercanas.
Los vuelos también son una opción, con el Aeropuerto Internacional de Esquel recibiendo vuelos directos desde Buenos Aires. Además, a menos de cuatro horas en auto, se encuentra el Aeropuerto de Bariloche, con más frecuencias. Esto hace que la ciudad sea fácilmente accesible desde distintos puntos del país y del extranjero.