En el marco de la expansión del coronavirus y la parálisis total de la actividad económica, referentes del trade turístico del interior del país analizaron el escenario actual y ratificaron que las cajas de las pymes son nulas; así como vislumbran que habrá bajas y heridos por la pandemia.
Al respecto, José González, Héctor Viñuales y Claudio Manibesa, presidente de la Cámara de Turismo de Córdoba, titular de la Fedecatur y presidente de la ARAV, respectivamente, exhortaron por una intervención real del Estado; mientras que recordaron que sin la posibilidad de facturar, es inviable que las firmas afronten las obligaciones impositivas, salariales y de los servicios.
ACORRALADOS
“Para las agencias de viajes, este estado de crisis, que es compartido con los hoteles y restaurantes, se viene arrastrando desde el año pasado cuando se comenzó a aplicar el impuesto PAIS”, dijo González, quien describió al panorama como tétrico.
“No hay ninguna medida concreta para estas actividades que están totalmente paradas. A otros sectores les han llegado algunos paliativos, pero a nosotros no”, declaró, y enfatizó que las pymes turísticas no recibieron la rebaja total de los aportes patronales ni créditos a tasa cero.
“Por más esfuerzos que se hagan es imposible tomar préstamos con intereses, ya que te seguís endeudando y no sé sabe cuándo vamos a salir de esta situación”, sentenció.
En este orden y tras recordar que según el Gobierno “Turismo es la tercera o cuarta actividad socio económica de Argentina”, el dirigente cordobés recalcó que no le están dando esa importancia y manifestó: “Sin ser agorero, veo la situación muy difícil y con el cierre de numerosos establecimientos, por eso esperamos que se pongan las pilas y nos den una mano porque, de acuerdo a las evaluaciones previas en el mundo, van a transcurrir no menos de 180 días para que comience a girar la rueda del turismo y un año para que vuelvan a consolidarse los destinos”.
Desde la Fedecatur su titular coincidió que Turismo no sólo es la industria más golpeada, sino que además será la última actividad en recuperarse, y por ello remarcó: “El sector necesita la implementación de medidas específicas, porque la actualidad es preocupante pero el futuro es aún peor”.
En este orden, lamentó que los anuncios del Gobierno no atiendan la demanda real de las pymes del interior, las cuales mayoritariamente tienen a sus empleados por fuera del orden bancario. “Si bien la plantilla está registrada formalmente y se realizan los aportes correspondientes, en el Norte argentino,
por cuestiones culturales el 80% de los empleados no están bancarizados y la foto a nivel nacional no difiere demasiado”, detalló Viñuales.
A su vez y tras subrayar que gran parte de los establecimientos hoteleros y gastronómicos siguen sin pagar los sueldos de marzo, el presidente de la Fedecatur denunció que varios bancos no están otorgando los créditos que el Gobierno prometió.
A su turno y tras admitir que se vienen meses muy difíciles para el sector, Manibesa declaró que para afrontar la crisis los empresarios deberán poner dinero de su bolsillo, y sostuvo: “Esta crisis es sumamente grave a nivel de fondo y creo que las medidas en algún momento van a tener que ampliarse para favorecer a todos los sectores”.
Para terminar, el dirigente aseveró que las agencias no escapan a esta realidad y que los cierren de las empresas son una posibilidad; mientras que recalcó que “es momento de ponernos más rígidos y enérgicos con nuestros pedidos porque si no es probable que tiendan a desaparecer muchas pymes”.