Con parte de la temporada invernal ya perdida, la emergencia turística nacional comenzó a ser analizada en el Congreso y Bariloche sumó su aporte con la propuesta de extender los plazos de los beneficios y llegar hasta diciembre con el pago de la mitad de los salarios de los trabajadores por parte del Gobierno.
El proyecto en debate fue impulsado por el vicepresidente de la Cámara de Turismo en Diputados, el formoseño Gustavo Fernández Patri (Frente de Todos) quien junto a sus pares Ricardo Wellbach (Misiones) y el rionegrino Luis Di Giácomo, se reunió el fin de semana de manera virtual con el intendente Gustavo Gennuso, empresarios y gremios de Bariloche vinculados a la hotelería, la gastronomía, agencias de viajes y otros rubros del sector.
“Manifestamos nuestra premura de que salga la emergencia y realizamos aportes al proyecto”, dijo a RÍO NEGRO el intendente Gennuso quien se mostró satisfecho porque encontró en los parlamentarios “conciencia de la particular situación que vive el sector turístico”.
El proyecto del formoseño que integra la bancada oficialista comenzó a tratarse la semana pasada y ayer tenía prevista una reunión de comisión que quedó suspendida. El ministro Matías Lammens participó del inicio del debate de la ley aunque dijo que la emergencia “está declarada de hecho” con el paquete de ayudas anunciadas para el sector.
La Comisión de Turismo, está presidida por el mendocino radical Alfredo Cornejo y aunque no la integra*, en esta ocasión Di Giácomo (Juntos Somos Río Negro) participó del análisis y acercó al sector de Bariloche la iniciativa. En Congreso hay otros dos proyectos de emergencia impulsados por la senadora Silvina García Larraburu (Frente de Todos) y la diputada Lorena Matzen (Juntos por el Cambio).
El proyecto fija el estado de emergencia por un año a partir de la salida del aislamiento social y establece diferimientos de pagos, suspensión de ejecuciones, acceso al crédito a tasa cero, exención del impuesto a los débitos y a los créditos, y reducción del 50% del IVA para alojamiento a los residentes argentinos, entre otros puntos.
Gennuso dijo que los representantes de Bariloche realizaron “observaciones puntuales”. Por ejemplo, uno de los artículos del proyecto establece que el ATP, el aporte del Gobierno para cubrir el 50% de los salarios de los trabajadores, se otorgará hasta los salarios de octubre. El empresariado pidió que se extienda hasta diciembre inclusive. “Vemos que eso no alcanza porque el sector turístico no se va a recuperar de inmediato cuando empiece a trabajar”, opinó el intendente.
El jefe de Gabinete, Marcos Barberis, quien proviene del sector turístico local, señaló además a este diario que se solicitó ampliar la cobertura de la emergencia que en la iniciativa está acotada a hotelería, gastronomía y agencias de viajes. “Solicitamos que incluya a todas las actividades que contempla el nomenclador de la Organización Mundial del Turismo como microemprendedores, transportistas y otros servicios”, aclaró.
También Barberis dijo que Bariloche propuso la generación de un fondo de promoción turística para fomentar los destinos nacionales y generar beneficios fiscales para el consumo interno con el descuento por ganancias o disminución del IVA para todos los rubros turísticos.
El sector empresario cree fundamental la declaración de la emergencia nacional porque encuentra allí un paraguas de beneficios más amplio que lo que pueda otorgar la provincia. La Cámara de Turismo de Bariloche cuantifica las pérdidas del sector en 6.000 millones de pesos entre marzo y julio.
*En el texto original erroneamente se consignó que en la comisión no había representantes rionegrinos, sin embargo, la diputada Matzen es vocal.
10 puntos clave del proyecto
1.- La emergencia turística tendrá un año de plazo desde la finalización de las medidas de aislamiento social.
2.- Alcanza a servicios de hotelería, gastronomía y agencias de viajes. Desde Bariloche se pidió ampliarla a otros rubros turísticos como transporte, comercios y servicios.
3.- El ATP (50% de salarios aportado por el Gobierno) se extiende a los trabajadores de pymes del sector hasta los sueldos de octubre.
4.- Diferimientos de impuestos nacionales hasta el 31 de diciembre de 2020 y suspensión de ejecuciones fiscales.
5.- Deja sin efecto la caducidad de planes de pago de impuestos nacionales hasta el 31 de octubre.
6.- Postergación de moratoria hasta el 30 de noviembre y las cuotas comienzan a devengarse en enero de 2021.
7.- Exención del impuesto a los débitos y a los créditos.
8.- Otorgamiento de créditos a tasa cero para la adquisición de equipamiento de seguridad sanitaria y tecnología relacionada a la covid-19.
9.- Reducción del IVA al 50% para la hotelería hasta marzo de 2021 aplicable solo a residentes en Argentina.
10.- Subsidio a guías de turismo equivalente al salario mínimo vital y móvil, entre los meses de junio y octubre.