Culminó enero en materia de turismo y los balances comienzan a realizarse, especialmente desde el sector privado con un movimiento turístico interesante, claramente no el que tiene la ciudad durante el primer mes del verano habitualmente, pero con un movimiento al fin después de 10 meses de inactividad absoluta por la Pandemia.
Cristian Loustau, de la Red de Alquileres Temporarios de Puerto Madryn destacó que “es una temporada inestable pero bien en cuanto a expectativas después de muchos meses cerrados, sin nada de actividad”.
El 2020 finalizó prácticamente dudando por muchos momentos de la realización de la temporada de verano y el turismo es una actividad que requiere previsibilidad. “Estuvimos mucho tiempo sin saber si íbamos a tener temporada de verano, bajo ese parámetro es una temporada buena. Tuvimos algo en el mes de enero, la mitad de ocupación que regularmente tenemos en una temporada normal. Debemos haber cerrado enero con un 40% de promedio de ocupación cuando normalmente enero cerramos al 90%. Es un número estimativo, no oficial”, agregó el empresario local.
Las idas y vueltas de los rumores de posibles restricciones y el famoso “nos vuelven a encerrar” provocó que la gente que estaba decidida a salir de vacaciones repensara su decisión por temor a no poder cumplir con su descanso como lo planificó. Esto se reflejó en el comportamiento del turismo.
“El turismo se maneja con previsibilidad y en un momento dado estas dudas hicieron que muchas reservas se cayeran por temor a cierres y demás rumores nacionales que nos afectó a todos. Tratamos de transmitir siempre, desde el sector privado al público que necesitamos trabajar con expectativas con previsión. Se mantuvo lo que estaba reservado y se notó la merma en la circulación de turismo. Ahora las expectativas están puestas en Carnaval porque la gente está consultando para llegar a la ciudad durante este mes. Esperamos tener un febrero bueno también”, agregó Loustau.
Finalmente, remarcó que “dentro del contexto nacional con una pandemia aún vigente, la temporada es buena. No nos olvidemos que hasta noviembre –diciembre estábamos encerrados sin poder decidir dónde vacacionar en verano porque no había actividad turística. Hoy, de creer que no tendríamos temporada tenemos una temporada activa, no es normal a niveles históricos pero en este contexto, tenemos una temporada positiva durante enero”.
La estadía parece haber crecido en la ciudad por el comportamiento del turista ya que en este verano se notó la permanencia en el lugar de la gente que antes hacía un turismo más itinerante. Sigue sobresaliendo la presencia de turismo nacional, especialmente desde Buenos Aires y también hubo gente de la región que llegó a la ciudad, especialmente de Comodoro Rivadavia y Santa Cruz.