Agregó que “aparte hemos equipado varias cosas como en la boletería; ahora los boleteros atenderán en base a un micrófono, no va a haber un contacto directo y también en la sala de 371 localidades la hemos convertido en 152, menos de la mitad.” Aclaró además que el protocolo prevé que todos en el cine tiene que entrar con el barbijo, ver la película con el barbijo puesto y lo mismo si te levantas y te vas”.
Además aclaró que “es un lugar donde tiene techos altos, donde corre aire y va a haber un espacio entre función y función más o menos entre 30 y 45 minutos para desinfectar la sala”.
También dijo que “el cine es un lugar seguro diría conceptualmente hasta más seguro que un supermercado donde estás rodeado de gente. Aquí van a tener distancia, ya que vos estás mirando la pantalla y el que está atrás con barbijos está a un metro y medio y de espaldas”, reseñó El Chubut.
Finalmente dijo que “hace siete meses que nosotros estamos cerrados, ya no sabemos qué hacer, vendimos las joyas de la abuela y realmente tenemos una necesidad imperiosa de abrir nuestra sala y aunque todavía no lleguen estrenos queremos abrir a un precio módico cosa que la gente vuelva porque lo que yo siento que con esto vamos a tener que convivir un tiempo y el convivir en ese tiempo debemos ser los primeros que tenemos que cuidar a la gente”.