Ya está ocurriendo en España: la gente buscará espacios abiertos en contacto con la naturaleza, como el camping.
El Coronavirus cambió el mundo y el próximo verano seguramente lo veremos reflejado en la forma de irse de vacaciones.
Ya está ocurriendo en España: la gente buscará espacios abiertos en contacto con la naturaleza. Y en esta nota se detalla qué medidas sanitarias tomaron los campings de ese país.
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) de España, el sector del camping creció un 8 % en los últimos años, y en 2019 alcanzó 22,3 millones de pernoctaciones.
¿Cómo afectó el coronavirus a este sector?
El 70 % de las reservas que se hicieron antes de la pandemia se mantienen y, además, en las últimas 2 semanas las reservas experimentaron un incremento de otro 70 %.
No hay duda de que una buena parte de esos clientes son novatos que, por primera vez, se decantaron por un camping para sus vacaciones de verano.
Se trata de familias con niños que buscan un turismo en el que sea posible disfrutar del aire libre en un entorno seguro donde puedan cumplir con las normas que ayudan a minimizar los contagios por coronavirus como la distancia social.
Aunque algunos de estos establecimientos abrieron con la llegada de la Fase 1 a sus provincias, los más de 1.200 campings que hay en España retomarán su actividad antes del 1 de julio. No es una fecha casual: a partir de ese día se producirá el levantamiento de la cuarentena obligada de 14 días para los visitantes del exterior, una medida (más económica que sanitaria, tal vez) que se convirtió en una de las grandes esperanzas del sector.
La pregunta, entonces, es qué medidas tomarán estos establecimientos para evitar una segunda ola de contagios. Un protocolo sanitario elaborado por el Ministerio de Sanidad las detalla a todas y estas son algunas de ellas:
Al igual que están planeando algunas compañías aéreas con los asientos de los aviones, no estaría mal dejar una parcela vacía entre medio de otras dos ocupadas. Tampoco colocar dispensers de alcohol en gel en los baños y obligar al uso de barbijos en lugares comunes, entre otras medidas.
El resultado servirá de referencia a los establecimientos argentinos para ver qué parte del protocolo copiar y cuál mejorar. Porque todo indica que el verano 2021 será en contacto con el aire libre y la naturaleza, lejos de la muchedumbre. (Perfil)