Viñas del Nant y Fall se encuentra a 12 kilómetros de Trevelin camino a la frontera con Chile, sobre la ruta 259, en una chacra de 4 hectáreas recorrida por 500 metros del arroyo Nant y Fall. Se encuentra abierto todo el año y cuenta con estacionamiento exclusivo para motorhome, espacio para carpas, visitas guiadas, venta de productos regionales y comida casera.
Emmanuel Gómez, trabajador de Viñas del Nant y Fall, en dialogo con EQSnotas.com comentó que por la pandemia pensaban tener una temporada tranquila pero desde el mes de diciembre vienen trabajando al cien por ciento con una gran afluencia de visitantes que llegan a disfrutar del lugar.
Comentó que este año alcanzaron uno de los objetivos que se propusieron: atraer el público local. «Esquel y Trevelin es como que conoció un lugar nuevo» sostuvo e indicó que el 70 por ciento de los visitantes son vecinos de estas ciudades y «eso nos pone muy contentos».
En cuanto a los servicios que ofrecen, detalló que tienen viñedos, bodegas, hacen visitas guiadas, catas de vinos. También cuentan con el estacionamiento de motorhome, el área de camping donde se puede pernoctar o simplemente pasar el día
Respecto a la producción manifestó que crece año a año y eso los llevó a construir una nueva bodega durante la pandemia. «Una alegría enorme porque eso marca un poco el crecimiento que está teniendo el emprendimiento. El viñedo este año viene muy bien y creo que vamos a tener una cosecha más que interesante», dijo.
En este sentido, destacó que Nant y Fall es un emprendimiento familiar donde trabajan en conjunto tres generaciones y «eso le da un plus al lugar porque cuando uno está un poco bajoneado o pasó algo el otro está ahí para empujarlo y no dejarlo caer. Creo que es la esencia de Nant y Fall y lo que lo ha marcado en el tiempo».